Donostia Ospitaleko eskolan egindako lanak topatuko dituzu blog honetan. Ospitalean egonaldi desberdinak egiten dituzten neska mutilen lanak egongo dira ikusgai.

ESPERANZA

Kaixo! Primero me presentaré, me llamo Isabel y soy una de las muchas madres que tienes un hijo con cáncer.
A mi hijo de quince años le detectaron un cáncer de tibia en Mayo del 2011, desde un principio os puedo asegurar que lo hemos llevado muy bien, somos y nos sentimos alegres, estamos contentos y lo mas importante, disfrutamos de los demás y de la vida, eso sí, vivimos día a día, nada de planes para mañana, nos levantamos y sobre la martxa, hay días buenos y días muy buenos, los malos los hemos dejado en el olvido, nunca hay un día malo si quieres disfrutar, a un día malo siempre se le busca algo bueno, igual que a las personas, a las circunstancias, etc...
El día en el que me senté frente al médico y me dijo que Aitor (así se llama mi hijo) padecía un cáncer de tibia, no me lo podía creer, me derrumbé, empecé a llorar y lo único que pude decirle al médico es que me dejara diez minutos para situarme, amueblar la cabeza y por supuesto hacer la digestión de la noticia. Justo en ese momento tu cerebro se divide en un porcentaje muy alto en algo que yo lo he puesto el nombre de TRAMPA y en un mínimo porcentaje algo que lo denominé SALIDA. Tenía y sentía mi pelea interior, al que llamé TRAMPA significaba impotencia, depresión, hundirse, vivir angustiado, preguntarse algo que no tiene respuesta ¿por qué? ¿por qué a mi hijo? ¿por qué a nosotros?, en fin, un sinfín de calificativos nada positivos, pero a la contra estaba la SALIDA, estaba el luchar, el ser positivo, el no pasa nada, estaba la superación, la calidad de vida, el disfrutar y por supuesto el ser feliz, tener un hijo con cáncer no significa vivir angustiado, triste, etc..
Efectivamente escogimos la opción de la SALIDA, se que es duro pero no imposible, nunca he tratado a mi hijo como un enfermo, siempre le he tratado de la misma forma que cuando, entre comillas estaba sano, disfrutamos de nuestras entradas y salidas del hospital, disfrutamos de nuestras sesiones de quimio, disfrutamos de la gente que vamos conociendo ( que son como la familia), en definitiva, cuando vamos al hospital decimos que vamos al hotel, entramos con una sonrisa y salimos con una doble, le he inculcado que esta vida es dura, pero la dureza no mata, que los problemas se solucionan todos, que nada es imposible, la verdad es que estoy orgullosa de mi hijo, estará mal decirlo porque soy su madre, pero la gente que nos conoce, sabe perfectamente que no miento, es un chico de quince años dispuesto a luchar, a sobrevivir, a encajar los golpes de frente y a vivir en esta vida con una sonrisa, una sobredosis de buen humor y porque no decirlo, a no acobardarse ante los problemas ni ante la palabra cáncer que por desgracia todavía sigue imponiendo.
Al día de hoy, os puedo asegurar que seguimos igual de felices y positivos. Aitor ha perdido la tibia y el juego del tobillo y el mayor chiste es que en la pierna no va a tener nunca lesiones, tales como el esguince. Espero poder daros toda mi positividad y ya se sabe que en estos casos lo mas fácil es tirar la toalla, pues no, animo y sobre todo dar las gracias a todo el personal que nos rodea, muchas gracias por existir y sobre todo ANIMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
BESOS, TXABELA

5 comentarios-iruskin :

Ana dijo...

Gracias por tu mensaje, gracias por lo que nos has aportado y enseñado con tus palabras que son toda una lección de vida, al fin y al cabo, las lecciones más importantes para aprender y poner en práctica.

¡Mucha suerte!

Ana.

Tzazu dijo...

Isabel, también te podías llamar Espe (Esperanza); y esto porque en cada frase de tu texto transmites fuerza, impulso, esperanza.... Es un gran ejemplo para quienes nos asustamos con solo leer la palabra cáncer.
Es verdad que las dificultades nos hacen crecer, pero más si les miramos de frente y lo compartimos con los seres queridos, con los conocidos y también con los desconocidos.

Gracias Isabel por compatir tu sentir con todos.

Tzazu

Egoitz dijo...

Hola Isabel yo soy la mama de un niño que desde los 5 años esta en una silla de ruedas si moverse (tretraplejico)y a parte su vida depende de un respirador ya que su diafragma no funciona.
Me a encantado leer estas palabras de animo me siento muy identificada con lo que has escrito, nosotros también siempre estamos con la sonrisa en la boca y los malos momentos en cuestión de minutos los tiramos a la basura, no sirven para nada. Pienso que en esta vida estamos para vivir con enfermedades, problemas, limitaciones.... Pero sobre todo vivir felices y con la mente pensando en positivo todo sale mejor.
Un beso y a seguir bien.

Anónimo dijo...

¡Hola Isabel y hola a todas esas madres (nos llaman "coraje", yo siempre digo que simplemente madres, porque ¿qué no hace una madre por sus hijos?) y padres, hermanos, abuelos... y demás personas que siempre están a nuestro lado.
Mi caso es uno más, Ion tiene esquizofrenia desde los 18 años, hace de eso 6, y él dice que hay que pasarlo para saber lo que es; pero desde principio llamó a la enfermedad por su nombre y echamos para adelante, unas veces cuesta arriba y otras en llano; pero siempre viviendo el ratito y sacando la mejor lectura de lo fuerte que nos estamos haciendo y lo unidos que estamos. La vida no es sencilla y a nosotros nos ha tocado esto, por ello no vamos a dejar de disfrutar todos los momentos buenos y vivirla con intensidad.
A ti Isabel, a tu hijo y a los que tengan la suerte de poder curarse, os deseo que lo logréis, y vuestro ejemplo sea de ayuda a tantos otros que tendrán que pasar por lo mismo, y a Egoitz, que aunque la enfermedad de nuestros hijos es para siempre sigamos alimentándonos de esa sonrisa y esos besos que nos dan cada día para agradecernos el saber que estamos junto a ellos.
Mi hijo me dice que es feliz, porque tiene mucha suerte de tener la familia y los amigos que tiene.
Un besooooo. Rosa.

Tzazu dijo...

Kaixo a todas!

¿Cómo agradeceros por todo lo que estáis compartiendo con todos nosotr@s a traves de este blog? Quienes no estamos viviendo experiencias como las vuestras, y que desde fuera las vemos como “muy intensas”, no sabemos que es eso pero gracias a que lo compartís con gente desconocida, hacéis/permitís que sepamos un poco más de esa parte tan desconocida para el resto de los mortales de lo que es la enfermedad.

Oíros es veros: la sonrisa limpia, la fuerza en todo vuestro ser, el vivir el presente, el tirar del carro día a día…… Yo estoy aprendiendo mucho con vosotras.

Mil gracias por compartirlo con el mundo.

Mila Esker!